Much@s de vosotr@s nos preguntáis a menudo el por qué no aceptamos pago a contra reembolso y hoy hemos querido hacer una entrada en nuestro blog explicando el por qué no trabajamos con él.
Os vamos a poner un supuesto práctico (que parece irreal pero se ha dado) de un pedido a contra reembolso: Pedido de X cosas a contra reembolso que se reenvía en el plazo correcto y llega a la oficina de la ciudad de la persona que hace el pedido, el mensajero le deja una notificación en el buzón y este paquete no se recoge. Pasados 15 días nos devuelven el pedido porque no se ha recogido, mandamos un mail a la persona que nos ha hecho esa compra a contra reembolso y nos responde: “Ui perdona, lo he pensado mejor y el artículo que he pedido ya no me interesa ” ¿Parece una excusa? Esta es de las más creíbles, con eso os contamos todo.
¿Qué hemos ganado con esto? Que nadie nos ha pagado esos gastos de envío y que tenemos un pedido en nuestra oficina sin dueño, claro que lo puedes volver a vender… pero hay tallas más difíciles de vender que otras y como mínimo has perdido esos gastos de envío y el tiempo de tramitar el pedido.
¿Conclusión? Aunque todo el mundo dice que es serio, lo cierto es que no es verdad… y por las personas que no son serias es porque no trabajamos a contrareembolso, sólo damos opción a abonar una pequeña cantidad del pedido como depósito y a la entrega pagar el importe restante.
Esperamos que este pequeño texto os valga para entendernos un poco más en este aspecto. Muchas gracias a los que cada día confiáis en nosotros vuestros pedidos
